El Gran Andy Otero

Andy Otero Serrano es de esos jugadores que desde sus primeros pasos por el béisbol ha llamado la atención de todos los conocedores de este deporte.
El año pasado, dirigentes y fanáticos esperaban ver al zurdo chiricano lanzando en la categoría juvenil del campeonato de béisbol nacional, pero los Bravos de Atlanta se adelantaron, lo firmaron lo que le impidió jugar en el torneo local.
“Para mí fue algo sorpresivo y acepto que hasta me hizo sentir muy triste”, recordó el pelotero. “El sueño no solo mío, sino de todos los peloteros desde que jugamos en los torneos infantiles es llegar a vestir el uniforme provincial juvenil de Chiriquí, luego el que es más difícil, el de la mayor y no se pudo”, sentenció el jugador.
“Todos estábamos entusiasmados, venía el nacional que significaría el alcanzar el tricampeonato y me quedé con las ganas”, acotó.
El izquierdo, quien cumplió un año de su firma con los Bravos de Atlanta, está recién llegado a casa, procedente del campo de entrenamientos de los Bravos, en San Pedro de Macorís, República Dominicana.

EL LLAMADO
Relató que recién iniciadas las vacaciones, sorpresivamente le llamaron para que fuera a Atlanta, y antes de un partido del equipo grande, le entregaron el trofeo emblema del jugador del año de la liga de dominicana, al igual que le informaban que había sido elegido el lanzador zurdo del año.

OPINIÓN
El joven tirador de apenas 17 años de edad, dijo estar satisfecho por el excelente desempeño logrado en su primera campaña en la liga de novatos de República Dominicana, donde logró seis victorias y un revés.
“Mi labor es de abridor y luego que trabajamos en un partido, cuatro días después nos ponen a lanzar un solo episodio, para evaluar nuestra recuperación”, explicó el pelotero.
El juvenil dijo estar satisfecho por los comentarios que le hizo el cuerpo técnico del equipo, más que nada en el progreso que ha demostrado.
“Solo me han hecho énfasis en que tengo que mejorar un poco mis lanzamientos de cambio, ya que la curva y la recta las manejo bien, con una velocidad que va de 89 a 90 millas”, puntualizó.
El tirador chiricano estará en suelo istmeño hasta principio de noviembre para retornar a liga de instrucción de Dominicana, en espera de que le asciendan a la liga rookie de la costa (Estados Unidos), para luego ir ascendiendo en las diferentes fincas de entrenamiento.

LA FAMILIA
Lo más difícil que ha enfrentado es la ausencia de su familia, ya que según él, nunca antes había estado alejado de ellos por más de dos semanas.
“Me he mentalizado en que me metí en este deporte para tener un mejor futuro para mí y mi familia y luego podré disfrutar de lo que hoy no puedo con la continuidad de antes”, manifestó Otero.
Tras una pausa, aceptó que estando fuera de casa se evalúan más las cosas, hasta las más mínimas y de forma marcada la comida de mamá y los consejos y regaños de sus padres.
Sostuvo que en República Dominicana tienen buen futuro los panameños Ernesto Silva, Alexis Pinto y Ricardo Pérez, entre otros.
Por: Eduardo Espinosa