PANAMÁ. Decepcionado de su propia gente, así se encuentra Alberto ‘Beto’ Macré, el técnico que más alegrías le ha dado a la provincia chiricana, luego de ver como sus coprovincianos, en la sede regional de Pandeportes, han conspirado para que no reciba su salario como funcionario de esa institución deportiva.
Macré, quien gana 390 dólares por ser instructor en Chiriquí, no cobrará, ya que según la institución agotó sus tres semanas de licencia con sueldo, como ordena el Código de Trabajo.
Macré, quien gana 390 dólares por ser instructor en Chiriquí, no cobrará, ya que según la institución agotó sus tres semanas de licencia con sueldo, como ordena el Código de Trabajo.
El estratega, que le ha dado dos tricampeonatos a Chiriquí, uno en la mayor y otro en la juvenil, podrá continuar al frente de la tropa del Valle de la Luna, pero con una licencia sin sueldo o utilizando su tiempo compensatorio.
Con un estado de ánimo por el suelo y arrinconado en un esquina del dogout de visitante del estadio Rod Carew, Macré denunció que él no es el único técnico que trabaja en Pandeportes y está dirigiendo en el juvenil, y a los demás no les han hecho lo mismo.
La Estrella conoció que la presión hacia Macré radica en que un alto funcionario de Pandeportes en Chiriquí todavía anda molesto porque su nómina perdió en la elección de la Liga Provincial interna y ahora quiere perjudicar al técnico, quien lo dirigió hace un par de años en la categoría juvenil.
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